Hace cuatro años me certifiqué como facilitador de la metodología «LEGO Serious Play», cuyo objeto es mejorar los procesos de creatividad, comunicación y colaboración en organizaciones. Así, empresas del calibre de Procter & Gamble o Microsoft utilizan regularmente esta metodología para configurar equipos o para la toma de decisiones estratégicas.
Poco poco comencé a desarrollar una aplicación de esta metodología a la mediación, aplicándola en mis propias mediaciones con excelentes resultados. En el siguiente artículo (publicado en Kiosko de Mediación) comento brevemente mi experiencia en este ámbito:
Cómo mediar con modelos en 3D
kiosko –
Mi experiencia utilizando la metodología “LEGO Serious Play” en mediaciones
I. ¿Mediar con piezas de LEGO?
Sí. Y veamos la razón: La mediación funciona especialmente bien porque, en lugar de decir a las partes cuáles son los problemas por resolver y/o sus posibles soluciones, se permite que sean ellas mismas las que descubran las respuestas a estos interrogantes.
Esto también hace que conducir una mediación sea un proceso particularmente complejo y desafiante. ¿Cómo hacer para comunicar sin decir? ¿Cómo hacer para que las partes puedan descubrir por ellas mismas esas cosas que quizás son evidentes para todos los demás? Esto se hace a través de lo que se denomina “generar un cambio del observador”: Las intervenciones del mediador permiten que las partes observen la (su) realidad desde nuevas perspectivas y ángulos y así puedan identificar y comprender lo que desde su lugar original no les era posible.
Si analizamos las principales herramientas de las distintas escuelas de mediación (p.ej. empoderamiento, legitimación, identificación de temas e intereses, construcción de historias alternativas, etc.) vemos que están orientadas a justamente a eso: a colocar a las partes en otros lugares para que, desde allí, puedan generar nuevas ideas y reflexiones, que serán la pauta de un accionar distinto y, por lo general, superador.
Para potenciar este “mirar desde otro lugar”, he desarrollado una derivación de la dinámica para gestionar equipos y toma de decisiones estratégicas en empresas llamada “LEGO Serious Play” que desde hace casi cuatro años estoy aplicando en algunas de mis mediaciones. Como lo indica su nombre, se utilizan piezas de LEGO (especialmente seleccionadas) para que, a través de un proceso facilitado por el mediador, las partes construyan modelos en 3D como respuestas a preguntas abiertas que formula el mediador. Estas construcciones son metáforas que representan una o más ideas que tienen las partes y que, entre otras cosas, producen ese “cambio del observador” que a veces es tan difícil conseguir.
II. Algunos ejemplos de intervenciones:
- Construcción de sufrimiento de las partes: Imaginemos la mediación de un divorcio altamente escalado en el que las partes están más interesadas destruir a la otra que en buscar una solución que les beneficie. No se escuchan, dejan de colaborar con el mediador y el proceso se estanca, causando frustración a todos.
En este caso, les pido que, con piezas de LEGO que pongo a su disposición, construyan (cada una en forma individual) dos torres: una que simbolice el sufrimiento que está teniendo en este proceso de divorcio y otra que simbolice el sufrimiento que cree que está teniendo la otra parte. Por lo general, la torre que cada parte construye representando su propio sufrimiento es significativamente más alta que el que representa el sufrimiento de la otra. Sin embargo, siempre construye una torre que representa un cierto grado de sufrimiento de la otra. Construir estas torres empodera a las partes y les permite desahogarse. Y también me permite hablar de las torres más pequeñas, es decir el sufrimiento que cada parte reconoce que la otra está teniendo, lo que genera un primer punto de empatía: muchas veces las partes se sorprenden al escuchar de la otra parte que existe un reconocimiento a su parte de lo doloroso de este proceso. La consecuencia es que la mediación se vuelve un poco más serena y colaboradora.
2. Construcción de afectación de terceras personas; Si hay hijos, a continuación pido a cada parte que construya una columna adicional cuya altura simbolice el sufrimiento que considera que sus vástagos están teniendo. Por lo general, estas columnas son las más altas. Esto me permite orientar la mirada de las partes a las consecuencias que este conflicto está teniendo sobre sus hijos y generar reflexiones acerca de cómo una colaboración entre ellas para gestionar este conflicto en la mediación permitiría reducir la altura de las columnas de sufrimiento, tanto las propias como las de sus hijos. A veces también les pido que reflexionen acerca de cuál es su misión como padres y si, viendo las columnas de sufrimiento de sus hijos, consideran que están siendo consecuentes con dicha misión.
3. Evitar colonizaciones de historias: En mediaciones con muchas partes (p.ej. pluralidad de herederos en una sucesión o socios de una empresa) puede resultar difícil obtener relatos limpios y claros que qué es lo les que afecta y necesitan, ya que lo que cuenta cada uno está influido por lo que han contado los que hablaron anteriormente. Cuando veo que esto puede ser un problema, pido a las partes que (cada una) construya un modelo que represente los problemas y temas que necesite resolver en la mediación. De esta manera, cuando comienzan los relatos, cada parte ya tiene su “historia” construida en 3D y esto le permitirá no perder el foco cuáles son sus problemas, intereses y necesidades, expresándose en forma más clara y precisa.
III. Por qué funciona
Las intervenciones descriptas (y otras más) sorprenden por su eficacia.
En forma muy resumida, los fundamentos de su funcionamiento son los siguientes:
- Al construir con las manos un modelo en 3D (en respuesta a una pregunta compleja y generalmente abstracta), se activan más zonas de nuestra mente que cuando únicamente pensamos. Esto permite que aflore un conocimiento inconsciente que se suma al consciente, facilitándose en consecuencia la generación de ideas nuevas y superadoras. Es muy común ver que las partes se sorprenden por toda la información que han volcado en su modelo.
- Las partes construyen sus modelos en forma individual y simultánea. Dicho de otra manera, las partes trabajan “en paralelo” en lugar de hacerlo en forma “secuencial”. Esto permite obtener el 100% de participación e implicación de cada parte.
- La comunicación utilizando modelos en 3D es más sencilla, ya que provee mayor cantidad de información. Además, es más clara y precisa que los relatos verbales. A esto se suma que los modelos, al ser metáforas, permiten a las partes tomar distancia de lo que se está hablando y en consecuencia actuar con un poco más de serenidad.
- La presencia de un mediador debidamente entrenado permite identificar el momento y la forma de introducir estas dinámicas. Y también que las partes se sientan cómodas con su desarrollo.
- La utilización de piezas LEGO simplifica la construcción de las metáforas. Podrían utilizarse otros elementos (otras técnicas como p.ej. en el Design Thinking utilizan cartón, metal, tijeras, etc.) pero ello haría la construcción mucho más compleja, imprecisa y lenta.
Conclusión:
Las técnicas de LEGO Serious Play pueden ser, en mi experiencia, tremendamente útiles para un mediador. No constituyen una nueva forma de mediar, pero son herramientas muy valiosas para superar muchos de los atascos y escollos con los que los mediadores nos encontramos habitualmente. El hecho de que sean relativamente sencillas les hace aún más atractivas.